INTRODUCCION
En la película “Inside Out”, hay cinco emociones que libran batallas en la mente de Riley, la protagonista,, lideradas por la enérgica y optimista Joy (alegría), y donde surgen la tristeza (Sadness), el miedo (Fear), el desagrado (Disgust) y la furia (Anger).
La película muestra la infancia feliz de Riley en el estado de Minesota y cómo las cosas se complican cuando se muda con su familia a la ciudad de San Francisco. Joy (alegría) trata de ganar la batalla en la mente de Riley pero tiene que librar un duro pulso con la tristeza y otras emociones ante las dificultades de la protagonista para adaptarse a su nueva casa, su nuevo colegio y los desafíos de una nueva etapa. Su primer día de escuela no arranca bien y acaba con Riley llorando frente a sus compañeros después de que la tristeza se adueñe del resto de emociones. La tristeza, altera también algunos de los recuerdos pasados de Riley, lo que complica aun más la experiencia de la protagonista. Joy intenta todo el rato entusiasmar a los demás. Pero Anger (la furia) y el miedo (Fear),y el desagrado (Disgust toman protagonismos según el momento.
Estos sentimientos surgen con algo aparentemente inocuo: Un traslado de residencia de toda la familia. Como surgirán estos sentimiento, y otros más, ante la realidad de un divorcio de los padres que afecta lugar de residencia, seguridad económica, estabilidad emocional de los padres y de los hijos?
Normalmente los padres que nos divorciamos tomamos las decisiones emotivamente y con acciones inmediatas que no tienen en cuenta las reacciones y sentimientos de los hijos.
Ana Maria Aschner Rosselli, tercera generación de psicólogas en la familia, nos ayudará a dar un significado constructivo y sanador a esta experiencia.
Las notas a continuación incluyen la presentación de Ana María y las contribuciones de los participante.
Hay diferentes tipos de divorcio y a uno le toma tiempo identificar las circunstancias.
Hay divorcios sorpresivos.
Hay divorcios en los que la pareja ya ha atravesado un proceso.
Hay divorcios en en que llevan un tiempo lejos y se han venido depidiendo poco a poco.
Hay divorcios en que uno de los dos no esta de acuerdo. Se genera rabia. La rabia conduce al dolor y se empiezan a utilizar diferentes tipos de mecanismos de poder.
Los más usuales son el dinero y los hijos. Pero hay elementos adicionales y empiezan a parecer demandas, comisarías de familia, juzgados de familia. El manejo de los hijos y las relaciones de cada uno con ellos es un mecanismo de presión muy fuerte.
Todo estos mecanismos de poder dificultan la elaboración del proceso.
Frases como “se me moviò el piso” describen la sensación de inseguridad que genera el proceso.
Pero también hay frases como “gané seguridad”. “me quité un peso de encima”.
Y si surge “empecé a construir familia nuevamente” el piso de la otra persona se mueve.
El Divorcio es un proceso de Duelo
Se puede hacer el duelo antes, durante o despùes del divorcio.
Para las niños es un proceso de muerte.
Cuando nos divorciamos no sabemos como serán las reacciones y las relaciones futuras con las personas afuera.
Y hay diferentes posiciones iniciales que pueden modificarse con las circunstancias del proceso. “El – Ella no es así”. Pero se empieza a juzgar.
En otras ocasiones la persona de la que uno se separa sigue en la vida de uno.
Aqui intervienen las pautas de crianza con que uno se formó. Tener conversaciones entre los dos sobre los hijos. Evitar los temores de ser juzgado. Surge la visión de la familia del otro.
Las etapas de cada uno de los miembros de la pareja no se suceden necesariamente en ese orden.
Hay momentos en que alguna de esas etapas ya se han vivido. Pero si hay dificultades puede devolverse a una etapa anterior.
- La negación es la dificultad de conectarse con la realidad.La persona sigue conversando normal, como si nada hubiera pasado. No cuentan nada. No manifiesta emoción. Esta etapa dura poso tiempo.
- Rabia: Si no se cumplen las expectativas de uno de los miembros de la pareja surge la rabia. Rabia hacia si mismo y rabia hacia el otro. La rabia no es totalmente negativa. Permite poner límites. Se pasa de “El-Ella es tan lindo-a, perfecto-a” a “pero tal vez no es asì”. La emociones vienen para comunicar y permiten poner límites.
- Culpa: Resentimiento. “Por qué?”. “Podría haber hecho algo diferente?”. Para aliviar la culpa se le dan muchas cosas a los hijos.
- Negociación: La persona necesita entender y necesita negociar consigo mismo. Surge la tentación de volver. Cuando la persona empieza a entender puede haber una baja en el ánimo.
- Se empieza a reconocer una pérdida. La persona se siente sin energía, cansada.
- Aceptaciòn: OK. Ya entiendo la situación. La persona comienza a tomar acciones. Asiste a grupos de cocina, a círculos de mujeres. Los hombres aún no han creado círculos similares. Se empieza entender que una pareja nueva es una opción aceptable.
Esta etapa puede durar muchas personas. Hay personas que se quedan estancadas en la rabia. Es la semilla del odio. La persona se para desde un punto de poder.
- Responsabilidad: La persona se hace responsable de atraer su propia realidad. De la que vivió y de la que sigue viviendo.
En los niños las etapas son similares, pero se viven y se expresan de manera diferente.
En primer lugar hay cambios de rutinas. Se producen más pataletas, llantos, rabias. Empiezan a llorar sin motivo. A los dos años son esponjas y absorben las emociones de los padres.
Un consejo importante: “Si usted quiere que su hijo cambie, empiece a cambiar usted primero”.
Los niños se recuperan muy rápido.
Ellos ven el mundo a través de los ojos de sus padres.
Cuando la persona piensa “ Yo no le digo nada”. Se olvida que los niños sienten el pánico de sus padres. En lugar de decirle “No te subas a las calera wlwctrica”, es mejor decirle ”Te tomo de la mano y los dos vamos a la escalera porque a mi me da miedo que te caigas”.
El mejor regalo para un hijo es la honestidad en la actuación de cada uno de los padres.
El adolecente en su proceso de crecimiento mide los límites para romperlos. En el divorcio de sus padres debe enfrentar el movimiento de los límites.
En todas las edades a los hijos se les afecta su seguridad. Inclusive de adultos se pueden cuestionar la realidad de su infancia.
Los hijos pueden desarrollar el miedo a quedarse solos.
Son muy sensibles a la comunicación entre los padres.
Uno debe preguntarse: “Desde donde me quiero contactar con el otro? – A través de mis hijos?”. SE debe tratar de soltar y no crear un efecto de contrapeso.
Las mamás son más controladoras. El niño aprende a visualizar las diferentes reglas en los diferentes hogares de sus padres.
El adolecente se vuelve pareja de la mamá.
Hay que evitar colocar a los hijos en el rol de mediadores “Dile a tu mama / papá”. Los hijos, hijas no puden estar en una posición triangulada.
Hay que buscar las redes de apoyo a los niños. El colegio debe saber la situación de la familia.
Hay que romper todas y cada una de las creencias limitantes.
No tratar de ser perfeccionista. “Lo pude hacer diferente”.
No tiene que haber un culpable. Ni la pareja, ni los suegros, ni los amogos/amigas.
Evitar juzgar el proceso. Aceptarlo como viene y evitar actitudes preconcebidas sobre las relaciones y actitudes de los dos miembros de la pareja una vez divorciados.
Evitar Creer que en el divorcio se gana…ambos pierden
Las creencias se vuelven esquemas de comportamiento que a su vez se convierten en mandatos o en “deberías”.
Hay una sabia observación en un antiguo cuento infantil. “El patio de mi casa es muy particular. Cuando llueve se moja como todos los demás”,
El “debería” es una manera de esconder uno o varios miedos.
Generalmente el miedo al abandono es un abandono percibido en la niñez.
Por ejemplo un niño puede sentir una sensación de abandono cuando quiere subirse a las rodillas del padre que está leyendo el periódico y el padre lo rechaza para seguir leyendo.
Este miedo al abandono genera actitudes como abandonar antes de que me abandonen.
El niño adoptado puede sentir sensación de rechazo, que lo induce al miedo a la escasez, al abuso y que llevan finalmente a un miedo a la sociedad y a un miedo a la muerte.
El adulto que de niño ha tenido un miedo al abuso buscará una pareja muy parecida a la herida que hay que sanar.
El miedo a la soledad es un miedo a dejar de existir.
El adulto proyecta el miedo al abandono de su niño interior o no divorciándose, o supliendo con regalos y similares la posibilidad de generar ese miedo en los hijos.
El niño en busca de seguridad ante el proceso de divorcio d elos padres busca apegos. La necesidad de control es uno de los apegos mas fuertes.
Es posible que padres e hijos se sientan todos víctimas.
Generalmente la relación con los hijos mejora.
Tiene que haber justicia. La justicia es el resultado de un acuerdo entre las personas. Finalmente existe la Justicia Divina.
El divorcio es doloroso. Lo importante es no agregarle el sufrimiento.
Es importante acompañar a los hijos en su dolor.
El odio y el rencor son una consecuencia de la falta de trabajo personal.
Uno debe preguntarse que vino a traerme el divorcio? Que voy a hacer?
Y ser consciente de que lo que impide crecer a una persona es que es soy así. Pero esto corta las raíces. Se vuelve un Bonsai.
El divorcio es un camino de muchos desapegos.
En el divorcio se ven las sombras de las personas. Se aprende a trabajar en ellas.
Es importante decidir no sembrar mas dolor.
El dolor es obligatorio. El sufrimiento es voluntarios.
En un divorcio cuando hay hijos la relación con la pareja continúa toda la vida. No se termina con la separación física, ni con la separación de bienes, ni con el crecimiento de los hijos.
Cuando ya adultos se casan y tiene familia, los nietos generan nuevas relaciones entre los abuelos divorciados. Por lo tanto:
Se debe elaborar el divorcio
Se debe elaborar la relación con el otro.
La honestidad con los hijos es la mejor enseñanza que se les puede dar. Ellos perciben. Y perciben aún antes de que los padres tomen la decisión de separarse.
Hay que aprender a vivir con el dolor. Se deja en la cas y no se lleva a la oficina?
Las emociones vienen y deben tratarse como invitados. Terminada la reunión deben irse.
Si se quedan toman posesión.
Es importante identificar lo que “creo que perdí”. Que es?.
Es el principio del desapego.
Hay que entender que la falla como pareja no es una falla como padre o madre.
Jalil Gibran escribiò: “Los hijos son Hijos de la Vida”
Hay que buscar y utilizar las herramientas a disposición de padres e hijos para acompañar el proceso del divorcio.
PRESENTACION COMPLETA
Presentación Charla sobre divorcio copia 2 (1)
Ana Maria Aschner y André Van Hissenhoven han creado un colectivo:
AMAR colectivo que busca generar espacios que permitan recordar la propia esencia, a partir de la fusión entre la psicoterapia y la consciencia.
El nombre nace del amor entre sus fundadores, de las iniciales de su fundadora y de la intención de ambos de cocrear esa Nueva Tierra (Nova Gaia) que se está gestando en la actualidad.
https://www.amarcolectivo.com/